Él es “nuestro perrito”. Fue traído por una persona que dijo lo había encontrado abandonado en la ruta. Cuando llegó era lo más parecido a un esqueleto canino. Casi no caminaba y además tenía una pata y una mano lastimadas y con muchos gusanos. Con mucha paciencia y muchísimo cariño, muy lentamente comenzó a recuperarse. Hoy día se aprovecha de su gran tamaño y asusta con frecuencia a todos los otros, que cuando lo ven venir, salen corriendo y llorando para otro lado. Es sumamente juguetón y travieso, pero también muy obediente. Adora “desparramarse” en el almohadón de su cucha cuando llega la hora de comer y también le encanta caminar junto a la pierna de uno, esperando una “urgente caricia”. Edad aproximada: 5 años. Desparasitado.TITO - en ADOPCION
Él es “nuestro perrito”. Fue traído por una persona que dijo lo había encontrado abandonado en la ruta. Cuando llegó era lo más parecido a un esqueleto canino. Casi no caminaba y además tenía una pata y una mano lastimadas y con muchos gusanos. Con mucha paciencia y muchísimo cariño, muy lentamente comenzó a recuperarse. Hoy día se aprovecha de su gran tamaño y asusta con frecuencia a todos los otros, que cuando lo ven venir, salen corriendo y llorando para otro lado. Es sumamente juguetón y travieso, pero también muy obediente. Adora “desparramarse” en el almohadón de su cucha cuando llega la hora de comer y también le encanta caminar junto a la pierna de uno, esperando una “urgente caricia”. Edad aproximada: 5 años. Desparasitado.
